martes, noviembre 04, 2025

Pitt Tristan

Terminada la temporada taurina pienso en una especie de dietario con cosas recuperadas de apuntes, frases, historietas recogidas por ahí, algunas sin recordar su origen pero casi siempre de otros, de aquellos que tienen algo que decir.

Pues yo apunté cosas tuyas en mi cuadernillo, misántropo:

La decisión de incorporar a la persona amada a nuestra vida se hace en condiciones muy desfavorables, a saber, cuando estamos enamorados. Sijn sentido, pues, de la realidad, la catástrofe es de esperar, salvo que el azar intervenga a nuestro favor y acertemos sin más.

La paciencia es un árbol de raíces amargas pero de frutos muy dulces.

Mientras los hombres cuentan aventuras que nunca tuvieron, las mujeres tienen aventuras que nunca contarán.

En las bodas el cura debería preguntar a los contrayentes si juran caerse simpáticos toda la vida.

Corren malos tiempos para las parejas. Los hombres buscan mujeres tradicionales que ya no existen, y ellas un hombre nuevo que está por venir. Amén.

Parace comprobado que mantener vivo y activo un matrimonio resulta una carga demasiado pesada para una sola persona.

- ¿Porqué vosotras las mujeres siempre tratáis de impresionarnos con la apariencia, y no con la inteligencia?.

Porque hay más posibilidades de que un hombre sea estúpido que ciego.

"Hace cien años, Gabriel Tarde, un sociólogo francés, concluyó que la civilización futura será una sociedad de misántropos, una sociedad donde, ya superada la etapa tribal del trabajo en equipo y demás promiscuidades como la competencia económica, las personas ya no se tengan que ver las unas a las otras, ni pedirse favores ni pasarse facturas, y cada una viva dedicada a sus cosas y contenta consigo misma. O sea, un misántropo es un ser altamente civilizado que se da cuenta de que la gente todavía es demasiado defectuosa como para pertenecer a la humanidad". 

Y tú, si tú, también llevo rebuscando cosillas antiguas por tu blog, que igual hago aparecer por aquí.

A ver lo que escribes.