En vez de un "¿bailamos?", el playboy de secano les preguntaba a las guiris de la disco si querían follar.
Con la música a todo volumen, ni se enteraban....
(Y así, también le vacilaba a la peña).
Hasta que un día, confundido, se lo pidió a una paisana, a la cual le faltó tiempo para contárselo a su esposo, y a éste, para soltarle un puñetazo en todas las narices.
3 comentarios:
Si es que a éste la noche le confunde. Fijo.
Para mi que era costero, en el interior no hay guiris...
Pero perfectamente creible en ambas versiones..
...al final la gracia de la frase le salió cara y es que a los graciosos estas cosas nos acaban pasando factura.
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