lunes, octubre 26, 2015

Trabajo para los refugiados....



....si se prohibiera emplear ninguna clase de motor para el cultivo del olivo y la producción del aceite de oliva -esa bendición para la salud-.
De forma análoga a la singular regulación que pesa sobre el cultivo y producción de tabaco, pero sin mecanización. Jornales y mulos.
Igual como se hacía en el siglo diecinueve.
Todo un ejemplo de decisión salomónica -y supranacional, claro-; porque, si ya no hay trabajo para algunos millones de europeos (y aguarda a cuando se popularicen las impresoras 3-D), ¿de qué van a vivir esas gentes que han llegado sin preguntar?.

Retrocedamos a enero de 1937, en el parlamento alemán:
"La salvación de nuestro pueblo no es un problema de hacienda, sino exclusivamente un problema del empleo y de la utilización de nuestra mano de obra, por un lado, y por otro, de la explotación de la tierra y del subsuelo...
Porque la comunidad popular no vive del valor ficticio del dinero sino de la producción real que es lo que da valor al dinero.

Sí, lo dijo Hitler, pero ¿cuánto personal deja en la cuneta la ultratecnología, la robotización y la especulación sin límites?.

Dejadme opinar que lo "arregladito" del aspecto de algunos refugiados me chirría tanto como ver los todo-terrenos nuevecitos que alguien vende a las guerrillas. Alguien son esos "bloques" que venden a unos, o los otros que venden a los demás. Sin que haga falta cobrar al contado; hay petroleo por allí....
Y esa gente sin enterarse; es inaudito que el Corán no contemple nada sobre la fraternidad entre fieles, entre comunidades musulmanas. Se dejan liar por occidente.
(No parece que ningún sirio vaya a refugiarse a Dubai ni a los Emiratos Árabes).
Occidente, por cierto, que no puede (¿podemos?) estar de brazos cruzados:



En otro orden de cosas, este blog cumple nueve años.




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