miércoles, abril 22, 2015

Atentado visual


Nada, que al incorporarme de la taza, el espejo del baño me ha devuelto una extraña imagen: la sudadera roja y el calzoncillo verde de conjunto.
Ni ese cuerpo serrano en el que iban embutidos podía disminuir los "chirridos" que emitía la córnea.
Luego, eso ha quedado en la intimidad, pero me ha hecho recordar la leyenda de que, empleando calcetines y gallumbos del mismo color, un caballero en paños menores pierde algo menos de elegancia en el lance.

Decididamente, los colores complementarios se dan de hostias entre sí.




Échale un vistazo a este ameno post sobre el efecto psicológico de los colores.

2 comentarios:

Toy folloso dijo...

Una dama que emplee alguna de las piezas de lencería del vomitivo color beige, no hace falta que la otra sea del color complementario para que quede estéticamente muy mal.
Si la otra también es beige, se puede quedar sin novio; directamente....

D.F. dijo...

Joder con el beige..