sábado, mayo 24, 2008

Trabajo a medida

Existe una enfermedad incurable que se llama tener la bisagra oxidada, (una bisagra imaginaria que todos tenemos a la altura de los riñones, que funciona con ligereza dándole un uso frecuente; trabajando, por ejemplo).
A Pepón se le oxidó por haber estado holgazaneando unos cuatro años, los que van desde que terminó los estudios hasta que sus padres amenazaron de echarle de casa si no traía un sueldo.
Ni que decir tiene que el "defecto" le ha obligado a dejar muchos empleos "de mutuo acuerdo".
Pero el trabajo que tiene ahora le está durando bastante: chófer de funeraria.
- Pepón, cabronazo, en el coche ese que conduces, la plaza trasera tiene pinta de ser mogollón de incómoda.
- Incomodísima, no entiendo como nadie se queja.
¡Es de un simple....!

5 comentarios:

Unknown dijo...

Menos mal que Pepón no se entera, a mí me daría un yuyu... ;)
Besitos!

Anónimo dijo...

Chofer de funeraria.
En ese carro si hay espacio apra hacer de todo :P

Rita dijo...

Ei!!! Gràcies per l'info de l'Illa i per cuidar-me-la! hehehehehehe Em queda una mica lluny a mi ;)
Uns petons, noi!

Churra dijo...

Pues atras al menos se ire acostadito no?...
Un beso

Mescalino dijo...

Y menos mal que no se quejan, porque si no el susto sería de órdago...

Salud y fuerza!!