Continuación de la entrada anterior

A mediados de Febrero, en 2008, ya había contado unos cuantos chistes picantes, publicado alguna fotografía guarrilla y varias entradas sinvergonzonas como ésta.
Tal vez a causa de los fríos, ahora la cosa va de política e injusticias.
La próxima entrada ya continuará en la línea habitual....
Pero aún queda poner la guinda al post anterior; ¿lo has leído?.

Me salió un grano en el culo, mira.


En forma de denuncia.
Por circular fuera de pista, motorizado.
Bueno, en una mina de arcilla a cielo abierto, abandonada.
Un amigo la fotografió:



En ese lugar, hace dos años, apareció este vertido que denunciamos en prensa y revistas de ámbito estatal.
Ahora los restos de pintura están envenenando las raíces de los pocos árboles que brotaron de nuevo, después de las extracciones, y los botes, cien metros más abajo, por efecto de las lluvias,
No solo nadie ha restaurado la zona, sino que ni siquiera se han molestado en investigar el vertido, que con toda seguridad aportaría pistas -número de fabricación de los botes, etiquetas del transportista, etc.- para poder sancionar ejemplarmente al desaprensivo decorador.


Fotografía de Roses, un ejemplo de montaña arrasada legalmente.
Muchas de esas construcciones se realizan arrojando el escombro directamente al mar.
Los chalés más antiguos, también lo hacen con las aguas fecales, en canalizaciones disimuladas en la roca.
En días de fuerte viento, algunas embarcaciones que practican la pesca de arrastre, o sea, rastrillan el fondo marino, lo hacen en el interior de la bahía.
Ahí mismo es donde van a parar los peces de rio que mueren por culpa de los herbicidas y pesticidas que emplean en los arrozales del delta.
A pesar del control portuario, todos los restaurantes caros de la zona ofrecen platos de "pezqueñines no, gracias".
Han puesto un enorme vertedero a menos de doscientos metros de unas viviendas, cuyos vecinos, visto el accionariado de la empresa explotadora, jamás lograrán clausurar. Apuntar de paso, la demencial gestión de los gases y "jugos" del vertedero de marras.
A tiro de piedra de allí está la depuradora local, que no debe hacer demasiado bien su trabajo, visto el color y olor de las aguas que vierte a un rio habitualmente seco. Medio kilómetro cauce abajo, el rio se vuelve a secar; justo delante de los pozos de captación de agua comarcales. Por ello, todo conocedor de semejante chapuza emplea agua embotellada, ¡incluso para lavarse los dientes!.
También tenemos canteras, enormes heridas en el territorio, la importancia de las cuales parecen ignorar en asociaciones naturalistas y ayuntamientos. Porque en las "altas esferas", tal vez encontraríamos oscuras relaciones con el explotador...

Intentaré hacer llegar este post al Departament de Medi Ambient, por si tiene a bien hacer que sus agentes forestales se cuiden de asuntos menos mediáticos, pero ecologicamente más importantes, que multar a unos desprevenidos motoristas.


Lo de mediático iba para gentes como este usuario de Flickr, "chunkfree".
Veo tu foto, y apuesto otras tres:



Árboles asfixiados por la maleza, moribundos de puro abandono.


¿Vamos a comparar la erosión que causan las motos con la de las excavadoras?.


Pincelada de humor para finalizar la entrada.
Admirad el joven practicante de trial que sale fotografiado en la revista Pronto de esta semana.
(Sin casco y con la moto perdiendo aceite).
¡Éste del "Juanca".....!.