miércoles, julio 27, 2016

"Pantumaca"





Pa amb tomàquet, o esa costumbre que tenemos los catalanes de consumir pan untado con tomate y aliñado. Para tomar con embutido, anchoas, jamón, carne a la parrilla, etc., (pero no con quesos, pescado ni guisos.).
Al igual que ocurre con la sidra y los finos que, -fuera de la ribera cantábrica y Andalucía respectivamente-, pierden todo su encanto, si algún visitante quiere emular en su tierra esa nuestra costumbre, se dará cuenta que la mayoría de clases de tomate no sirven para ese cometido; sólo sueltan agua y grano.
En cambio el tomàquet de penjar, o sea, de colgar, porque se cuelga en racimos cuando aún está verde, tiene una pulpa carnosa que se esparce como una mantequilla por el pan -especialmente si está tostado-.
De color amarillo anaranjado, se llega a guardar casi un año a condición que el local donde se almacene sea seco y ventilado. Tal vez por la laboriosidad del proceso, llega a alcanzar los 5 euros/quilo.


 A fin de abaratar costes en el bar, me apunto a un nuevo pluriempleo, -chapista-pintor cincuenta horas semanales y barman, veinte más-,


Si el cuerpo aguanta, el banco no se va a quedar con mi vivienda.
¡Cómo ha cambiado todo en quince años!, entrando ya en terreno de obviedades....