...no mola.
A los discos antiguos sometidos a remasterización, se les "pule" el sonido y se rellenan con ruido los mínimos espacios en blanco, o mudos.
No buscaré la versión original para saberlo, igual tiene la culpa el doblaje, pero, en la película de ayer tarde, estaban conversando dos personas y no logré entenderlas por el ruido que había ¡dentro de un modernísimo jet privado!. Continuó la conversación en el interior de, nada menos, un Roll-Royce, y más de lo mismo, esta vez por el estruendo del tráfico.
Las bandas sonoras en el cine, tan sabiamente administradas antaño, ahora se integran en la contaminación sonora general.
Barrunto que, a una clásica formación de guitarra, bajo y batería, no se le permitiría grabar nada sin añadirle un montón de sintetizadores, cajas de ritmo y samples.
Odiosa mezcla de música, ruido y diálogos en todo lo que sale del altavoz. El mando del volumen medio escacharrado a la fuerza. Imposible un segundo de silencio en medio de cualquier audición.
(Y como la entrada va de quejas -sin trascendencia, temo-, entonces, ya puestos, que cambie esa puta mierda de ONU, se vitaminice y mineralice, y con la contundencia de un Gran Hermano mundial, si hace falta, vele por la paz y la ecología en nuestro planeta).
No hay comentarios:
Publicar un comentario