domingo, junio 24, 2007

Susurro

Cogí una diarrea que te cagas, y me la tuve que curar con remedios caseros; manzanas, membrillo y arroz hervido, (no me hagáis reír, aún) porque unas pastillas que la cortan, que tengo en el botiquín, están caducadas.
Como no pienso mantener otras salmonellas a mi costa, he ido a la farmacia a comprar pastillas nuevas.
Allí, el señor que tenía delante, cuando le ha tocado el turno, ha pedido:
_ vrg
_ ¿Perdón?
_ vrga
_ ¿Cómo ha dicho?
_ vigr
_ Ahh, sí, sí, vinagre. ¿Vinagre de Jerez? ¿De Módena?
_ No, no...
_ Perdone la broma. Le he entendido perfectamente. Un momento..

Respondiendo a la discreción que parecía pedir el cliente, el dependiente ha traído el medicamento ya envuelto en la rebotica.
Y no nos hemos enterado nadie.
JUOO, JUOO, (arf, arf) JUOOOO, JUOOOOOOO.

8 comentarios:

Índigo dijo...

No vale reírse de los decaídos: les costará aún más remontar.
Saluditos

Joana dijo...

Abans els preservatius es demanaven en veu baixa! I ara es demanen a crits:DE GUST DE XOCOLATA!!!!! ;)

tootels dijo...

joputa el boticario, que cachondoo je je je
NUNCA MAIS

Elena dijo...

pues que lleve una recetita y no hay problema :-)

Xiomara dijo...

Saludos es un placer venir a conocer tu blog.

Besos!

PRU dijo...

Pobre hombre, sólo quería una bisagra para la puerta de su casa... y encima, en lugar de ir a la ferretería se equivoca, y no le decís nada...

Pa cagarse... (ups, perdón...)

Tamaruca dijo...

Anda, yo pensaba que irían con receta. Como ahora te hacen ir al médico a buscarla hasta para un simple antibiótico, con la pereza que da :(

Anónimo dijo...

TIENES MUCHA IMAGINACION CHAVAL SIGUE ASI. DESDE LOGROÑO,POR CIERTO LAS FOTOS MUY BUENAS.