¿Tirar el dinero?

Con motivo de la fiesta patronal, caña en mano, unos operarios subcontratados le comentaron  al gerente de la delegación la birria de sueldo que tenían.
Éste indagó en las cuentas de la central, quedando estupefacto ante el colosal presupuesto de mantenimiento.
Hizo números, resultando que podían contratar directamente a esos operarios, pagándoles el doble y ahorrarse casi la mitad de lo que les costaba la externalización del servicio.
Conclusión que hizo llegar a la cúpula de la empresa.
Y que fue desestimada.
"Ya tuvimos un equipo de mantenimiento en plantilla, pero un día se ponía malo uno, al día siguiente otro tenía un entierro en otra comunidad, pero mandaba a sustituirle a un amigo (que estaba parado ¡justo cuando hubo una inspección de trabajo!).
Problemas.
En fin, ahora tenemos el cuidado de todos los sistemas al día. No importa si la firma que lo lleva a cabo, lo subcontrata a otras empresas que tal vez lo subcontraten de nuevo. Les va la renovación en ello.
Un mantenimiento deficiente es doblemente costoso".