Tenemos, pero como si no tuviéramos.
Incluso evitamos mencionarlo; los heteros, claro.
Pocas bromas con el culo.
Si una mujer nos comenta algo acerca de nuestro trasero, reaccionamos pensando: "mejor se hubiera fijado en los bíceps, en el pecho-lobo, en la caída de ojos o hasta en el mismísimo rabo, pero el culo, ¡si todos lo tenemos igual de impersonal, de intrascendente, de aburrido!.
En una reunión "solo huomos" alguien inquirió: ¿Alguna vez os han comido el culo?.
Cállate bobo, que tu culo solo sirve para cagar, el nuestro es para que ellas lo disfruten.
Implícitamente, dejamos así zanjada la cuestión.
(Ya sé, se le podía haber sacado más jugo ¿?, pero igual queda en entredicho la inclinación mujeriega que tenemos).
4 comentarios:
Debo decir al respecto que no sé qué pasará dentro de unos años, pero a día de hoy ellas valoran bien mi culo. Igual que yo valoro los suyos, y otras partes de su anatomía.
Por lo tanto, reivindico mi culo. Que colabora para que se fijen en él y consecuentemente en mí.
Iba a dejar un cometario jocoso, pero entro, me encuentro nada menos que a James Joyce y ¡joder! se me ha bajado toda la líbido...
Sorry...otra vez será ;)
Mi experiencia me dice qe.. a la mayoría de los hombres les excita mucho que les laman el culo.. y qe les metan los deditos.. Aunque juren que no.. jeje.
Pues... la de la foto no piensa lo mismo... y yo tampoco.
Buen finde, Toy.
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