domingo, octubre 30, 2011

Extrañeza

Hace años, las computadoras reemplazaron a unos cuantos oficinistas, los cuales, fueron los primeros en cobrar el subsidio de desempleo de los que tuve noticia.
Paralelamente, la misma empresa contrató a unas gentes venidas de otro país para cuidar los jardines.
Qué extrañeza....
A riesgo de caérseles los anillos a los plumíferos, ¿no hubiera sido posible un apaño doméstico?.
Parece que no.
Ni allí ni en ningún lado.

5.000.000 inmigrantes.
5.000.000 parados.
¡Y que ahora no me extrañe!.

2 comentarios:

belkis dijo...

Pues no hay de qué extrañarse, los números cantan!
Si sumo y sumo, y no resto del otro lado, al final todo se multiplica y toca menos a dividir.
Beso, Toy

D.F. dijo...

Parece ser un calculo bien hecho. La solución es difícil...